Si tienes una caravana, sabrás que aparcarla en la vía pública es una tarea complicada. La DGT impone normas para estacionar caravanas en la calle. Las caravanas se han convertido en el transporte de moda, especialmente durante las vacaciones de verano, pues brinda a los usuarios la máxima flexibilidad e independencia en las rutas sin tener que pagar los altos precios de un hotel. Te indicamos los lugares donde es posible aparcar una caravana.
El lugar más seguro para aparcar unacaravana es la parcela de un camping, pero cuando hablamos de aparcar en la urbe, la cosa se complica. Debes saber que las caravanas se deben aparcar junto al vehículo remolcador, pues está prohibido dejarlas sola.
Otro lugar por excelencia es una gasolinera o en área de servicio. Seguro que has visto camiones y furgonetas cuando has parado a medio camino en una para descansar y estirar las piernas.
La DGT permita estacionar en la vía pública siempre que el vehículo se encuentre correctamente aparcado y quepa dentro de las marcas viales de delimitación del aparcamiento. La DGT diferencia entre aparcar y acampar. La acampada se da cuando se instalan toldos, tenderetes, soportes, etc., que sobresalen del perímetro del vehículo. Pero, si la actividad que se desarrolla dentro de la caravana no trasciende al exterior, dice la DGT, que está permitido.
Según la ley, ningún vehículo, lo que incluye las caravanas, puede permanecer estacionado en la misma plaza de la vía pública más de 15 días. Pasado este tiempo, el vehículo podrá ser movilizado a otro lugar. Generalmente, los ayutamientos son laxos con este tiempo, y no suelen multar ni retirar el vehículo si toda la documentación está en regla. Ahora bien, si un vehículo permanece durante meses estacionado en el mismo lugar, podrías ser sancionado o incluso una grúa podría retirar el vehículo.
Sin embargo, esto solo sucede cuando el vehículo muestra fallos mecánicos o indicios de que no puede desplazarse. Esto incluye también que el seguro no esté en vigor, no ha pasado la ITV o no contiene matrícula.
En las zonas más rurales es posible encontrar grandes superficies de aparcamiento destinados a caravanas. No obstante, es posible también encontrar este tipo de superficies en entornos aledaños al aeropuerto, pues suele haber muchos polígonos y aparcamientos privados.
Los inconvenientes de tener una caravana aparcada mucho tiempo en un espacio abierto es que va a estar expuesta a más suciedad y temperaturas elevadas o muy bajas. No obstante, si vives cerca del parking, y puedes acudir a hacer revisiones del vehículo periódicamente, no es mala idea aparcar aquí. Además, el precio suele ser muy asequible.
En este caso, el suelo está pavimentado y hay vigilancia, por tanto, el personal del aparcamiento podrá revisar tu coche y, si lo deseas, podrás también limpiarlo si este servicio está incluido en el precio. Podrás recubrir tu vehículo con una lona para evitar que se ensucie y estará protegido durante las distintas estaciones del año.
Suelen ser más difíciles de encontrar y más caros, pues normalmente los parkings cerrados suelen tener más limitaciones de espacio. Es la mejor opción para aparcar tu caravana porque permanecerán íntegramente guarnecidas y supervisadas permanentemente por personal experto. Si te lo puedes permitir para dejar tu caravana estacionada por periodos largos, no te vas a arrepentir. Ahora bien, si tu presupuesto es más ajustado, las otras dos opciones no están nada mal.
Si te interesa aparcar tu caravana en un parking cerrado y descubierto por un tiempo limitado en Barcelona, Parking Low ofrece esa opción. El precio por aparcar una semana en este parking es de unos 110 euros.
En Sevilla, McParking dispone de aparcamientos al aire libre donde conviven turismos, furgonetas y caravanas. Las tarifas semanales por aparcar un turismo rondan los 32 euros, pero en caso de las furgonetas y caravanas, se aplica un suplemento por día.
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